¿Te pusiste más nerviosa al ser Los Goya?
Es verdad que cuando vi a Penélope Cruz en primera fila, ¡impone un poco! Pero fue los primeros segundos, de hecho, yo creo que seguíamos en la pausa de publicidad y entré en la música, en el momento, en el calor del público… y se me calmó todo.
Y en el momento de cantar en público, ¿cómo haces para meterte en el papel y concentrarte?
No hago algo en concreto, me sale como natural. Cuando era pequeña se me iba más la cabeza y piensas en todo, pero una vez empiezas a tener tablas, eres capaz de calmar eso que tienes en el estómago que no te deja pensar en otra cosa, y concentrarte en trasmitir y cantar la canción.
“Estoy de acuerdo con no separar la obra del autor. Si no te gusta lo que hago, ciao”
¿En algún momento vas a llegar sin nervios a un escenario?
¡No lo sé! Yo creo que mola tener ese gusanillo dentro que te da esa adrenalina a la hora de salir.
Algo que te caracteriza mucho es tu estética, y por Instagram también dejas claro todo lo que te gustan los viajes y los tatuajes. ¿Crees que estos factores te aportan algo a la hora de crear música?
Por supuesto. Los tatuajes yo los veo como otra forma de expresión, otro arte. De hecho, siempre que me he tatuado he dejado que el artista cree. Al final lo veo como si yo fuese un lienzo llevando su obra de arte encima. Y viajar por supuesto que te aporta para crear. Es nutrirte de nuevas experiencias, culturas, historias con tus amigas…