Marco, creo que esta última edición de Eurovisión, fuiste el único artista en cruzar el desfile de banderas sosteniendo la bandera del Progreso LGBTQ+, ¿por qué lo hiciste y qué representa para ti hacer ese gesto?
Fui el único con la bandera de la inclusión, pero pienso que todos los artistas presentes en ese desfile apoyaban el gesto. Estoy seguro cuando te digo que todos ellos apoyan los derechos para el colectivo. Yo fui quien la llevaba, pero éramos todos los que la respaldábamos, de verdad.
Lo hice porque en el último año, Europa mira a Italia preocupada, como si el país caminara hacia atrás en muchos aspectos que se centran en las libertades de las personas. Y no es cierto, porque en Italia viven muchísimas personas que opinan como yo y apoyan la idea de que somos personas que nacemos libres. Claro que tenemos que luchar por nuestras libertades, los hermanos tienen que sentirse que les apoyamos en cada escenario que estemos.
Hemos hablado mucho sobre este tema en el último año y creo que era fundamental e importante, subir a este escenario así, porque lo ven millones de personas y tenemos que utilizar la música para enviar mensajes de apoyo. Me gustaría que en mi país se acercara más al pensamiento europeo.
No quiero decir que considere enemigos a quiénes piensen diferente, a mí. Quiero hablar con quiénes opinen diferente y poder aprender sus motivaciones que les han impulsado a pensar diferente. Soy abierto en todo, no puedo cerrar la puerta, pero me gustaría saber por qué.
¿Pero quieres escuchar lo que tiene que decir, aquellas personas que no quieren aceptarte como eres y lo que piensas, verdad?
Exactamente. Mis padres, creo, me han enseñado esto. El diálogo es la base de todo y aunque una persona piense completamente diferente a ti, puede ser porque haya vivido experiencias diferentes y hasta podría comprenderlo.
