Orange quiere estimular para eliminar la brecha de género en las ciencias tecnológicas, por eso han anunciado esta semana la publicación de las bases del programa Come On. El programa está enfocado a las mujeres estudiantes que a través de proyectos innovadores relacionados con el Big Data, Ciberseguridad, Cloud, devOps…
La primera edición de esta iniciativa está abierta a alumnas que estén matriculadas en carreras universitarias STEM, o hayan finalizado en los últimos dos años y estén cursando formación relacionada con estas disciplinas, y cuyos centros de estudio cuenten con la posibilidad de formalizar un convenio en prácticas.
Las estudiantes tendrán acceso a un itinerario formativo de 6 meses (ampliable a un año), con prácticas formativas remuneradas, especialmente diseñado para favorecer su empleabilidad en profesiones vinculadas a las ciencias, y además:
- Crear redes de conocimiento y apoyo entre jóvenes mujeres con perfiles similares.
- Adquirir experiencias e información de mujeres referentes en profesiones científicas y técnicas.
- Dotar a las participantes de las herramientas necesarias para divulgar sus experiencias con el fin de animar a otras mujeres a seguir el mismo camino.
El programa Come On supone un paso más en el esfuerzo de Orange para fomentar el talento femenino en el área STEM e impulsar el papel de la mujer en el mundo tecnológico y digital.
Según el estudio “El desafío de las vocaciones STEM” publicado el pasado año por la patronal DigitalES, aún queda mucho por hacer en cuanto a la adopción por parte de las nuevas estudiantes, de carreras y profesiones relacionadas con las llamadas disciplinas STEM (acrónimo de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, en inglés).
Según las conclusiones de dicho estudio, mientras que en la universidad las chicas forman el colectivo mayoritario (55% chicas vs. 45% chicos), la representación de estas en las ingenierías es menor: concretamente el 25% en 2018.
Los resultados del análisis evidenciaban además un descenso mayor de matriculaciones en chicas que en chicos. Un dato adicional revelador, y que apoya la necesidad de más referentes para impulsar la presencia de la mujer en profesiones técnicas, era que las chicas con modelos femeninos en el campo científico-tecnológico mostraban un índice de interés en materias STEM superior al de aquellas que no tenían ninguno (41% vs 26%).
