Fotografía de Ana Portnoy

Graziella Moreno: «Empiezan una relación pasional que se trasforma en tóxica»

El salto de la araña de Graziella Moreno es Premio Letras del Mediterráneo 2020, aparte del reconocimiento es una angustiosa trama ficticia sobre un crimen. Una novela negra que pone el foco sobre su protagonista Javier, un corriente exterminador de plagas acusado de un asesinato, todo el libro recorrerá los días previos mientras se prepara para testificar en su juicio.

En esta novela el lector se podrá introducir en los pensamientos y recuerdos de Javier, ¿Ha sido laborioso introducirnos en sus pensamientos?

La verdad que sí, yo ya había escrito otra novela que parcialmente estaba escrito en primera persona, pero luego había tercera persona. Aquí hay un ser que cuenta su historia y no solo cuesta meterse en la cabeza de una persona, sino en la cabeza de un chico de unos veinte años, intentar expresarte cómo lo haría él que no tiene una formación especial y que cuenta las cosas tal y como las siente, todo evitando hacerme pesada ni repetitiva, porque tiene el lector que sentir que es Javier que le está hablando y no yo.

Javier se cuestiona en varias ocasiones quién es responsable de sus desafortunadas peripecias, ¿pero según tú quién es el responsable de que cada vez vaya a peor?

Yo creo que cuando sufrimos algo, nos ocurre alguna tragedia, siempre buscamos echarle la culpa a alguien. Como que la culpa es de los demás pero no nuestra.

Yo creo que Javi empieza a contar esta historia con todo ese rencor por todo ese amor que había sentido por ella que se había convertido en rencor porque él entiende que ha sido por su culpa. Pero a lo largo de la novela él va evolucionando y quiere escribir una novela honrada, ser sincero, y al revivir los hechos asume parte de la responsabilidad.

Como él menciona en varios momentos podría haberlo dejado todo, tener otra vida…

Yo creo que los dos realmente son culpables. Empiezan la relación muy joven, tienen un niño cuando tampoco están preparados, son una familia cuando son inmaduros y que todavía tienen que evolucionar como personas y esa madurez la hacen en etapas distintas.

Empiezan una relación muy pasional que se trasforma en una relación tóxica y que una relación vaya mal siempre es cosa de los dos.

Quería contar una relación tóxica de una pareja joven que se les escapa de las manos»

Graziella Moreno · Autora

¿Esa dependencia que tiene Javi con Alba estaba planteado o fue casual?

Sí que estaba pensado, porque como antes te dije se trata de una relación tóxica. Las relaciones tóxicas suponen que hay una carga de adrenalina importante, o sea sientes un amor hacia una persona que no digo que te obsesiones, pero siempre quieres sentirla esa adrenalina, ese tema hormonal que sale disparado.

¿Cómo nace esta novela?

La mayor parte de mis novelas, por no decir todas, se inspiran en hechos reales. Siempre digo que invento poco, que lo único que hago es transponer la realidad sin juzgar y ponerla en la novela para que el lector la vea y que este juzgue.

Aquí ocurre lo mismo, quería hablar de una relación tóxica de gente muy joven que es algo que he visto en muchas ocasiones, que no saben controlar y que se les escapa rápido de las manos.

Hablemos de Alba, tal y como nos la cuenta Javier, ¿el personaje de Alba es sicópata?

Yo diría que más que sicópata ella ha tenido una infancia muy complicada. Una infancia que no es infancia, porque su padre no existe y su madre le contó un cuento de hadas para contarle que eso es así y ella ha vivido en un mundo de fantasía.

Además su madre tampoco la ha criado como una figura materna, lo que ha generado el ansiar una relación estable de pareja, ser querida, no soporta que la controlen, quiere sentirse especial. Ella es una chica insatisfecha porque le falta una estructura familiar, ha crecido demasiado deprisa, se relaciona con gente de tráfico de drogas y recordemos que ha visto a su madre consumir también.

Hablemos del reconocimiento, ¿te esperabas el Premio Letras del Mediterráneo?

No la verdad, tenía en mente escribirla, pero no me esperaba ni mucho menos que esta novela mereciera un premio. Hay tantas buenas novelas por ahí que no te lo esperas y me hico muchísima ilusión.

¿Solo sentiste ilusión?

Bueno, ilusión, emoción y de todo (Ríe), porque yo he tenido otros premios por mi novela Invisibles que obtuvo un reconocimiento por la Fundación QSDglobal de Paco Lobató, porque hablaba de las desapariciones de personas y también en el Festival de Cubelles este verano.
Pero un Premio como el de Letras del Mediterráneo que tiene una trayectoria ilusiona.