Los Teufel CAGE PRO son la nueva apuesta del fabricante berlinés por competir en la gama media-alta de auriculares gaming inalámbricos.
Con un precio real de 199,99 euros y actualmente rebajado a 169,99 euros en su tienda oficial, estos auriculares gamers ofrecen un conjunto robusto de características que buscan convencer tanto a jugadores competitivos como a quienes valoran la versatilidad y el diseño en un solo producto.
Diseño con carácter y sin estridencias
Estéticamente, el CAGE PRO se alinea con el lenguaje visual propio del mundo gamer, pero sin caer en los excesos. Su diseño en negro mate, con acabados limpios y el logotipo Teufel grabado en la diadema, resulta moderno y elegante.
El detalle de las letras “T” texturizadas en las orejeras aporta un toque distintivo, mientras que las dos tiras LED en la parte trasera suman personalidad sin convertir el dispositivo en un festival de luces.
Eso sí, estas luces solo se pueden personalizar desde el software Teufel Audio Center, disponible en PC, y no ofrecen efectos dinámicos como los que ya se consideran estándar en marcas como Razer o Logitech G. Los colores son estáticos, sin animaciones de respiración, pulsos o modos de juego, una omisión que podría solucionarse con una actualización futura.
Comodidad y materiales preparados para el uso intensivo
El auricular incorpora un micrófono desmontable, flexible y de conexión magnética, una decisión acertada para quienes quieran usar los cascos fuera del entorno del set gaming, como en viajes o en oficinas.
En cuanto a ergonomía, el CAGE PRO presenta una construcción sólida y materiales de buena calidad. Las almohadillas de espuma viscoelástica están recubiertas por un tejido transpirable que Teufel denomina AirCooling, y que efectivamente ayuda a evitar la sudoración incluso en sesiones largas o en días calurosos. El diámetro de 40 milímetros permite alojar la oreja entera en el interior del auricular, algo que se agradece tras varias horas de uso. Un añadido interesante es el sistema de ventilación interno para disipar el calor generado durante el uso continuado.
Sin embargo, el peso es un tema a considerar. Con 345 gramos, se sitúa por encima de algunos de sus competidores directos, como los Razer Barracuda X Chroma o los Logitech G522 Lightspeed. Esta diferencia se nota, y aunque la diadema sujeta bien y no se desliza, el peso puede acabar produciendo una ligera fatiga cervical tras un uso prolongado. Otro detalle discutible es que las almohadillas no sean reemplazables, lo cual limita la vida útil del dispositivo si con el tiempo los materiales se deterioran.
Sonido envolvente con carácter
Donde el CAGE PRO brilla con más fuerza es en la experiencia sonora. Equipado con transductores HD de 40 milímetros, entrega un sonido potente, detallado y con una notable presencia de graves, sin caer en distorsiones. En juegos, la sensación de inmersión es sobresaliente, especialmente al activar el modo DTS Headphone:X v2, que simula sonido envolvente 7.1 y mejora enormemente la percepción espacial.
En títulos como Valorant, Call of Duty o The Last of Us, el jugador puede identificar con precisión la procedencia de pasos, disparos o explosiones. En música y contenidos audiovisuales, el perfil sigue siendo vibrante, con un enfoque algo cálido que prioriza la espectacularidad sobre la neutralidad. Por suerte, el ecualizador del software permite modificar los perfiles sonoros al gusto.
Un micrófono útil pero limitado
La calidad del micro no está a la altura del resto del conjunto. Si bien funciona bien en conversaciones y chats, su sonido carece de la claridad y cuerpo que uno esperaría en este rango de precio. Especialmente para quienes buscan hacer streaming o grabaciones de voz, este aspecto se queda algo corto. No obstante, seré claro, la distorsión del sonido recuerda a la calidad de los transmisores de la policía, por lo que en juegos multijugador, te mantiene dentro del mood de tu aventura.
No obstante, carece de cancelación activa de ruido y no incluye funciones como monitorización de voz o control por software avanzado. Para un uso competitivo básico es suficiente, pero no cumple con las expectativas si tu intención era grabar sonido en alta calidad, tampoco fue su finalidad.
Conectividad versátil pero sin multipunto real
En lo que respecta a conectividad, estos auriculares cumplen con nota. Ofrecen tres modos distintos de conexión: un dongle USB-C que opera en 2,4 GHz para juegos sin latencia, conectividad Bluetooth AAC compatible con móviles y tablets, y una entrada jack de 3,5 mm que amplía la compatibilidad a casi cualquier dispositivo. También cuentan con integración de Google Fast Pair y Microsoft Swift Pair, lo que facilita un emparejamiento rápido con dispositivos Android y Windows.
La única pega importante es que no permiten mantener dos conexiones activas al mismo tiempo. Si estás jugando por USB y te entra una llamada por Bluetooth, tendrás que desconectar y reconectar manualmente. No hay verdadera funcionalidad multipunto, lo cual resta fluidez a un dispositivo que, por precio, debería incluirla.
Autonomía sólida para largas sesiones
La batería integrada de 1 000 mAh promete hasta 68 horas de uso en modo inalámbrico sin LEDs, y durante nuestras pruebas se mantuvo cercana a las 60 reales, lo cual es un resultado más que satisfactorio. Además, cuenta con carga rápida: con apenas cinco minutos de carga puedes conseguir más de cinco horas de uso, lo que resulta muy útil si los necesitas de urgencia. La carga completa se realiza en una hora y veinte minutos, usando su puerto USB-C.
Un software funcional con margen de mejora
El Teufel Audio Center, disponible únicamente para Windows, cumple con lo básico: permite ajustar el ecualizador en diez bandas, activar o desactivar el sonido envolvente DTS, personalizar la iluminación y guardar perfiles. No obstante, la interfaz y opciones se sienten algo limitadas si se comparan con los ecosistemas de software más pulidos de otras marcas. No hay integración con juegos ni posibilidad de automatizar efectos visuales. Aunque funcional, da la sensación de que podría ofrecer más.
Hay que aclarar que no es imprescindible haberlo instalado, pues es un productazo plug and play, de fácil uso y configuración.
Conclusión: buena propuesta con puntos a revisar
El Teufel CAGE PRO es una propuesta interesante dentro del segmento gaming inalámbrico. Destaca por su calidad sonora, su diseño robusto y su excelente autonomía. También convence por su versatilidad de conexión y por detalles como el sistema de ventilación o el micro desmontable. Sin embargo, algunos aspectos como el peso, la falta de multipunto real, el micro limitado o las almohadillas no reemplazables dejan espacio para una evolución futura más ambiciosa.
Por su precio actual en promoción, es una compra recomendable para jugadores que priorizan el sonido envolvente, la comodidad en sesiones largas y la libertad de moverse sin cables. No es la opción ideal para streamers o creadores de contenido que buscan un audio de referencia, pero para la mayoría de usuarios que juegan en PC, consola o móvil, es un compañero fiable y con mucha personalidad.
