La heladería argentina Luciano’s aterriza en forma de nave espacial en Barcelona y Málaga, en un mes lo hará en Madrid, después de hacerlo en cuatro países anteriormente y arrasar incluso en Roma o Estados Unidos.
Lucciano’s fue fundada en 2011 por Daniel y Christian Otero, padre e hijo que detectaron que la industria del helado estaba detenida en el tiempo. Por eso decidieron poner en marcha este proyecto, que combina una calidad de helado artesanal superior con una fuerte apuesta innovadora y tecnológica que les permite ofrecer un producto premium. Y esto es así porque sus helados están elaborados con la mejor materia prima italiana y chocolates belgas.
Cada local, una experiencia única
Lejos de exportar el diseño de cada tienda a todas sus sucursales, Luciano’s propone hacer la visita de sus clientes en única y divertida. En Barcelona se ha pensado en un diseño espacial coronado por una imponente nave espacial y un astronauta flotando en el techo. Los detalles de las puertas y las pantallas de los precios recuerdan la misma nave.
“Cada local es diferente, pensamos en la experiencia del consumidor con un concepto que vaya ligado con la ciudad“, así anunciaba Christian Otero en la presentación. Afirman no usar los típicos iconos arquitectónicos de la ciudad, cómo harían con la proyección de Gaudí, porque su interés no es únicamente al cliente turista, sino acercar al público autóctono a su heladería.
El producto estrella, el helado, se prepara de forma artesanal con productos de origen italiano cada día en el laboratorio, situado al piso inferior de la tienda.
La mayoría del personal, según cuenta Martín, el jefe de producción, son procedentes de la pastelería. Eso permite armar uno a uno los helados de palo con divertidas formas mientras no se pierde en sabor.
Esta tienda estará formada por catorce empleados, entre tripulantes de sala y miembros del laboratorio.
Luciano’s es la única marca, según cuentan, en utilizar chocolate Belga para confeccionar estos helados.
“No nos importa ganar menos en la venta de cada helado, lo que queremos es aportar el helado de la mejor calidad a nuestros clientes para que quieran regresar” afirma Christian Otero, “los polos eran de origen industrial y entendimos crear una nueva experiencia de la más alta calidad con la incorporación de un chocolate que nadie antes se había atrevido a utilizar en heladerías”.
Su dulce de leche es procedente de Argentina, como sería de esperar. Y también encontraremos avellanas del Piamonte.
