Se trata de una película dirigida por Phil Tippett, conocido en el mundo del cine por ser el creador de los efectos especiales de películas tan reconocidas como Parque Jurásico o El Retorno del Jedi y que con esta película ha conseguido completar un proyecto que le ha llevado unos treinta años en terminarlo.
Una singular pesadilla, de reminiscencias bíblicas y poéticas, metáfora del colapso de las civilizaciones, que ha tardado treinta años en ver la luz, servida por una de las mentes creativas más estimulantes de los últimos años, en animación tradicional.
Un paseo al infierno guiado de la mano de Phil Tippett, no para todos los estómagos
La animación stop-motion de esta película es de primera categoría. Desde el diseño de personajes hasta la escenografía, los realizadores crearon un mundo post-apocalíptico hermoso, inquietante y con un ojo para la textura y el detalle para construir este mundo y convertirlo en un personaje en sí mismo.
La película no tiene diálogos, por lo que se basa en gran medida en los decorados creativos y los diseños de criaturas para hablar por sí misma.