La Reina de la Coma, como se la conocen en EUA, Mary Norris, ha venido a España para presentar su nuevo libro. Mi Gran Odisea Griega es un libro basado en hechos reales que entremezcla en cada capítulo su pasión por la cultura griega antigua, su profesión vocacional y su vida que es muy interesante ya de por sí.
Para Mary Norris, sus tres décadas frente la corrección de estilo de la revista neoyorquina The New Yorker, le han bastado para reconocer su verdadera pasión por la escritura y este libro se impregna en todos sus espacios.
Una oda a Grecia, a su idioma y a la escritura universal
Si me preguntáis de qué trata Mi Gran Odisea Griega tengo que decir que no es ni una biografia como tal, ni una guía de turismo como tal e incluso tampoco creo que ninguna etiqueta pueda ordenar esta apasionada lectura. De hecho no es nada y lo tiene todo.
El texto parte de una trama biográfica y sus múltiples acercamientos a la cultura griega clásica, esta pasión – casi psicótica- por esta cultura que ha sido padre de las lenguas modernas perdura a día de hoy en forma de abecedario, prefijos y sufijos e incluso en terminología médica. Descubrirás a lo lardo de sus páginas como a pesar del idioma, el griego clásico no es un idioma muerto, sino más vivo que nunca.
Puede emplearse también como libro de viaje para entrar en la Grecia de finales de los setenta y 2000, pues sus recorridos y experiencias llenan de forma salteada y sin orden, sus recomendaciones para visitar las muchas islas que bañan el Mediterráneo en un país que se cree que vive mirando a Asia.
Finalmente, de la misma forma que avanza en su trama, también recorre sus conocimientos en el griego clásico, empezando por aportar la escritura hasta presentando palabras que usamos en nuestra lengua actual. Es más, si de Grecia te gustaba la mitología, también tendrás un recorrido por la tradición de mitos clásicos y se puede emplear para adquirir conocimientos para cualquier estudiante de griego o aficionado, pues la revisión de su versión española ha sido minuciosamente cuidada por mi profesor de griego Joan Alberich que tradujo en su vida profesional varios de los autores clásicos al catalán y coescribió un diccionario griego en catalán con Francesc J. Cuartero i Iborra.