El nuevo álbum de Jay Wheeler, Girasoles, lanzado el 21 de marzo, ha superado los 90 millones de streams en solo diez días, consolidándose como un fenómeno global. Más allá de las cifras, este proyecto marca un antes y un después en su carrera, mostrando su lado más íntimo y emocional en un viaje musical que habla de crecimiento, madurez y amor.
Un hito en su carrera
La acogida en España no se ha hecho esperar. Girasoles ha debutado en el número 18 del EPDM Album Chart, y el tema Nota, junto a Omar Courtz, ya se encuentra en el Top 50 de Spotify España. Además, la canción ha alcanzado el puesto 21 en Shazam y ha sido tendencia en TikTok, con más de 12.000 creaciones de contenido. Madrid y Barcelona figuran entre sus cinco ciudades con más oyentes, confirmando la conexión especial que el público español está estableciendo con el artista.
Los datos que acompañan este lanzamiento son abrumadores. En Spotify, el álbum ha acumulado 29,4 millones de streams. En YouTube, los videoclips superan los 50,9 millones de visualizaciones, mientras que Apple Music ha registrado 7,1 millones de reproducciones. Además, Girasoles ha sido incluido en algunas de las playlists más influyentes del panorama latino.
Sobre el disco de Jay Wheeler
Inspirado por su etapa más personal como esposo y padre, Jay Wheeler ha dividido las 15 canciones del álbum en tres fases: semilla, crecimiento y florecimiento. A través de estos temas, el artista explora los altibajos emocionales de la vida, dejando claro que Girasoles es mucho más que un disco. Según el propio Wheeler, es una declaración de intenciones sobre cómo, a pesar de los desafíos, las personas pueden transformarse y florecer si siguen trabajando en sí mismas y se rodean de amor. Este trabajo es también un homenaje a tres figuras fundamentales en su vida: su madre, su hija y su esposa, Zhamira.
Más allá de su música, Wheeler mantiene un fuerte compromiso social. Es embajador de la organización Easter Seals, que apoya a niños con autismo, y ha creado una beca educativa en colaboración con la Puerto Rico Baseball Academy para jóvenes con talento que no cuentan con los recursos suficientes para alcanzar sus sueños. Este compromiso con la comunidad le ha hecho ganar el respeto no solo como artista, sino también como ser humano.
